Guía para elegir bien tu almohada: Todo lo que debes saber para un descanso real

En Kamuchy sabemos que una buena almohada no es solo un complemento: es una pieza clave para lograr un descanso profundo, reparador y libre de tensiones. Elegirla bien puede marcar la diferencia entre una noche cualquiera y una experiencia de verdadero bienestar.

Si estás en la búsqueda de tu almohada ideal, esta guía es para ti.

1. ¿Por qué es tan importante elegir bien tu almohada?

Una almohada adecuada alinea tu cuello, cabeza y columna, evitando dolores y mejorando la calidad del sueño. Una elección incorrecta puede causar molestias cervicales, ronquidos o incluso insomnio.

2. Tu postura al dormir lo define todo

Conocer la más habitual al dormir es el primer paso:

Boca arriba: busca una almohada de altura y firmeza media, que soporte el cuello sin empujarlo.

De lado: necesitas más soporte. Una almohada más firme y alta mantendrá el cuello alineado con la columna.

Boca abajo: opta por una almohada baja, muy suave o incluso prescinde de ella para no forzar el cuello.

3. ¿Debo tener en cuenta el relleno?

El interior de la almohada influye en la sensación, soporte y durabilidad. Estas son algunas opciones que encuentras en Kamuchy:

• Viscoelástica o espuma de memoria: se adapta a la forma de tu cabeza y cuello, aliviando la presión. Ideal para quienes buscan soporte firme pero cómodo.

Fibra: suave, ligera y fresca. Una excelente opción si prefieres una sensación más tradicional.

Plumas: extremadamente suaves, pero con menor soporte. Perfectas si te gusta una sensación extra suave y ligera.

4. ¿Almohada firme, suave o intermedia?

Depende de tu peso, postura y preferencias al momento de dormir:

  • Las almohadas firmes ofrecen mayor soporte cervical.

• Las suaves son perfectas para quienes buscan un mínimo de soporte y relajación.

• Las medias o firmes son una excelente opción si cambias de postura durante la noche.

5. ¿Cada cuánto debo cambiar mi almohada?

Aunque varía según el material y el uso, se recomienda cambiarla 1 vez al año para garantizar higiene y soporte adecuado. Si notas que se hunde, huele diferente o te levantas con molestias, es momento de renovarla.

6. Uso del forro protector:

Se recomienda usar forro protector para prolongar la vida útil de la almohada, puedes elegir entre efecto frío, o en telas térmicas con el ultimate.

¡Dormir bien empieza con elegir bien! Recuerda que no debes lavar tu almohada, debes ventilarla antes del primer uso y periódicamente. Descubre nuestras opciones únicas en nuestro portafolio y transforma tu descanso ahora mismo.

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